Estimado Anónimo.


Tras su último comentario, estoy como mínimo sorprendido. Parece que usted me conoce más de lo que deja ver. Que digo yo. ¿Si se esperaba mi respuesta y tiene ese poder de conocimiento anticipado?¿ Para que escribe esperando una segunda respuesta?


Iremos por partes. Como usted dice, sin ninguna duda la libertad sigue siendo parte fundamental del blog, y usted podrá continuar escribiendo en el blog sin identificarse. Pero cuando se trata de una persona como usted, que conoce tan bien el mundo de la cocina, los mercados, los productos y las identificaciones personales, entiendo que sería interesante para el resto de lectores del blog de Hinojo conocerle. Los productos son productos desde que nacen hasta que mueren. Defienda su producto dando la cara. No se le va a juzgar ni por ella ni por sus comentarios. Por tanto: Marcos, Josep, Manel, Hilario, Andreu, Margarita, Rosa o Gemma. El nombre da igual, pero mi intuición me dice que es aparte de persona, un producto. Simplemente darle la oportunidad de darlo a conocer en el medio. Señor anónimo. Con lo bonito que es tener un nombre desde que se nace...

En cuanto a la transparencia. No tergiverse usted las palabras y los contextos. Porque lo escrito, escrito está. Todo tiene una lógica. Y el no nombrar un determinado lugar lo hago para no perjudicar al restaurante de ninguna manera. Y le aseguro que cuando tenga que nombrar alguno por su buen hacer, lo haré con todas las de la ley. Pero no me parece justo ni ético hacer una crítica con nombres y apellidos cuando al fin y al cabo todo es cuestión de gustos. Y yo hablo de los míos con la verdad por delante.

En cuanto a sentirse aludido. Nadie tiene que darse por aludido si piensa que lo que hace es lo correcto. Ahora bien, si noto cierta irritación en sus comentario. ¿Exceso de mojo?

Al tema de la censura ni contesto. Relea usted lo que ha escrito. Repito, no hay censura y para muestra su botón. Lógicamente le repito que yo modero el blog porque para ofrecer calidad en un medio público, hay que apostar por un enfoque. Para evitar que se convierta en la casa del pueblo o un blog con multitud de temas de conversación. Por tanto si lo quiere ver así, en un aspecto si censuro. El blog es del Restaurante Hinojo, y por ello enfocamos el blog a la cocina, la gastronomía y todo lo que quiera usted y el resto de lectores comentar referente al mundo culinario. Simplemente por esa razón modero el blog, cuelgo sin censura los comentarios relacionados con lo anteriormente comentado y a disfrutar de la lectura.

En cuando a lo del pescado. Vuelve a asombrarme su capacidad de autorrespuesta. ¿Hermanos gemelos? Una pena, el programa ideal habría sido Salsa Rosa. Por aquello de la relación grastronómica y ya no se emite. En ningún caso Señor Anónimo hemos hablado de la procedencia de las carnes y pescados. Es ahora cuando usted pone el tema sobre la mesa. De mi boca no ha salido ninguna opinión al respecto. No hemos hablado de conservantes, ni colorantes. Y lo que es más importante tampoco me he pronunciado en contra o a favor de una u otra opción. Valgan estas últimas frases para contestar a sus pollitos y gallinas de corral que viven contentas y felices por el campo, y para su comentario de verduras. Ahora me parece de lógica aplastante que no haga falta explicar a los lectores que el solomillo refrigerado Argentino, se trae de Argentina y viene refrigerado. Y que los yogures tienen conservantes. Ello por tanto, me hace volver a pensar que nos conocemos y hemos hablado más de una vez de éstos otros temas, de grandes y pequeños de éste mundo y ahora usted sin ser muy consiente de donde escribe y quien lo lee, escribe basándose en conversaciones mantenidas conmigo durante muchas horas. Sólo que ahora desde su Anonimato lícito. Pero bajo mi punto de vista cobarde.

En ningún caso ofende señor, porque cuando uno no se siente identificado con los comentarios, no hay exceso de mojo y por tanto no hay irritación. No tiene porque darse por ofendido ni aludido. Me vale para aquello de nombrar a los que lo hacen mal o bien. Si esas son sus formas, criticar y dar nombres para hundir productos, ejerza usted el caciquismo. Yo no lo haré. Ni lo permitiré en éste lugar.

En cuanto al acoso y derribo del que habla para con los clientes según usted. Los textos colgados anteriormente simplemente expresan una opinión acerca de una determinada forma de hacer las cosas. Cocinar. No haga demagogia intentando hacer ver que hay restaurantes que lo pasan mal y por eso no ofrecen calidad en sus comidas.
Por otro lado dice usted que arremeto contra los clientes. Que no contra mis clientes por lo tanto entiendo que aún no ha visitado Hinojo. Le reitero mi invitación. Y volvemos al tema de darse por aludido con los comentarios. Señor anónimo. Nadie en el mundo se salva de comer un sandwich de gasolinera a las 03:00 de la mañana, o cualquier otro producto de baja calidad de vending. Por tanto "ningún estómago tiene vidrieras". Ni el suyo ni el mío. El problema está cuando convertimos lo ocasional en rutinario. Pasa con las comidas, el alcohol, el tabaco y cualquier otra cosa. Si su estómago no tiene vidrieras a diario, y no lleva una dieta saludable. Le sugiero por salud que se lo proponga. Que comience a corregir sus hábitos alimentarios. Es salud. Yo hace no mucho que cuido un poco más estas cositas y lo pongo en práctica. Le aseguro que me siento mejor.
Después de tomar el postre con usted. Le reitero mi invitación nuevamente a visitarnos y a encontrarse.
"La originalidad estriba únicamente en dar el nombre. Cread el nombre, y la cosa será creada." Friedrich Nietzsche

Un saludo.
Isaac Armas.